¿No hay una “nueva” ley de Cristo? Algunos intentaron desechar los diez mandamientos en base a los “nuevos” mandamientos del amor que Cristo introdujo. Es verdad que Jesús presentó dos grandes leyes de amor como resumen de toda la ley, ¿pero él dio la idea de que éstos fuesen nuevos a través del tiempo? La realidad es que él citó directamente al viejo testamento cuando dio esos nuevos mandamientos. “Y amarás a Jehová tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con todas tus fuerzas.” Deuteronomio 6:5. “No te vengarás, ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo, sino amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo Jehová.” Levíticas 19:18. En realidad, esos penetrantes principios espirituales habían sido olvidados por los legalistas del día de Cristo, y eran nuevos a ellos con relación a su vida y práctica. Pero no fueron pensados por Jesús para tomar el lugar de los diez mandamientos. Cuando el abogado preguntó a Jesús cuál era el mandamiento más grande de la ley, él recibió la respuesta: “Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas. “Mateo 22:37 - 40. Tome en cuenta que estos dos mandamientos simplemente fueron resumidos a “toda la ley y a los profetas.” Todos se sostienen de estos dos principios del amor. Cristo decía que el amor es el cumplimiento de la ley justo como Pablo la repitió más adelante en Romanos 13:10. Si uno ama a Cristo supremamente con el corazón, el alma, y la mente, él obedecerá los primeros cuatro mandamientos que tienen que ver con nuestro deber a Dios. Él no tomará el nombre del Dios en vano, adorando a otros dioses, etc. Si uno ama a su prójimo como a sí mismo, él obedecerá los últimos seis mandamientos que se relacionan con el deber con nuestros semejantes. Él no podrá robarle a su vecino, mentir sobre él, etc. El amor conducirá a obedecer o a cumplir toda la ley.